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jueves, 22 de febrero de 2007

Viaje a la luna


Hoy he asitido por primera vez a la asignatura de adptaciones literarias al cine. Una clase que creo consiste en ver aquellas películas cuya historia, es decir, el guión, está basado o calcado de un una obra literaria.


La profesora, un tanto crispada, porque muchos de nosotros no teníamos ni el esquema de la asignatura que dió el primer día (claro, allí está la clave querida profesora, que fue el primer día para ella, pero no para nosotros) ha intentado que viéramos y comprendiéramos la película de "Viaje a la luna" de Geo Méliès, aunque se trata de una adaptación de la novela. de Julio Verne, "De la Tierra a la Luna"

Ficha Técnica
Director / Productor / Diseños / Efectos especiales: Georges Méliès / Guión: Georges Méliès, según las novelas "De la Tierra a la Luna" de Jules Verne y "Los primeros hombres en la Luna" de H. G. Wells / Fotografía: Lucien Tainguy, Michaut / Intérpretes: Georges Méliès (Profesor Barbenfouillis), Bleuette Béron (La Dama Luna), Victor André, Henri Delannoy, Kelm Brunnet, Jean d'Alcy, Depierre, Farjaux, bailarines del cuerpo de baile del Châtelet, acróbatas del Foliés-Bergère / Nacionalidad y año: Francia 1902 / Duración y datos técnicos: 21 min. B/N.


Comentario
Esta película, "Viaje a la luna" considerada como el primer film de ciencia ficción, se rodó en 1902 y apenas dura veinte minutos, pero son los veinte minutos mejor aprovechados de la Historia del Cine. En siete instantes consiguen que varios hombrecillos lleguen a la Luna, echen una siesta, combatan con los extraterrestres y éstos terminen expulsando al grupo de hombres de su mundo lunático.

Sin embargo, ver esta películilla no tiene desperdicio, si es posible despacito y con lupa, porque toda ella está compuesta por planos generales y además fijos. La cámara se mantiene en un punto del que no se mueve y los actores entran y salen de escena por los laterales a modo de escenario teatral. Cada escena es un cuadro en sí misma, y me refiero a que hay que comtemplarla como si se tratase de una obra pictórica.



No voy a decir más, bueno sólo deciros que si podéis verla (igual es un poco difícil conseguirla) os fijéis en la azafatas que salen en los momento clave para adornar y animar la escena varonil, reflejo del papel de la mujer, ellos los cabezas pensantes y ellas las coristas del un, dos, tres.

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